Empresas de todos los tamaños están adoptando herramientas basadas en IA para traducir y generar contenido
a velocidades sin precedentes.
Sin embargo, este cambio plantea un debate: ¿es la IA una amenaza o una ventaja para la calidad y la coherencia
de la comunicación internacional?
Las ventajas de la IA en la creación de contenido multilingüe
La IA ha llegado para quedarse y seguir avanzando en todos los ámbitos, tanto personales como profesionales, de nuestras vidas.
En el caso de la creación de contenidos, las ventajas más directas son las siguientes:
1. Velocidad y eficiencia: :
una de las principales ventajas de la IA es su capacidad para procesar grandes volúmenes de texto en cuestión de segundos.
Por ejemplo, herramientas como Google Translate o DeepL han mejorado considerablemente en los últimos años y permiten generar
traducciones rápidas que, lejos de ser perfectas, pueden ofrecer una base sobre la que pueden trabajar equipos de
contenido o lingüistas.
2. Ahorro de costes:
la IA reduce la dependencia exclusiva de recursos humanos para tareas repetitivas, lo que puede traducirse en un ahorro significativo.
Para las empresas con presupuestos ajustados, estas herramientas pueden formar parte de la solución para gestionar proyectos
multilingües sin comprometer completamente su presupuesto.
3. Escalabilidad:
Tampoco hay que desdeñar la importancia del uso de colores en la comunicación visual. En Occidente, el blanco suele asociarse
con pureza o celebración, mientras que en países como China puede estar vinculado al luto. Ignorar estos matices culturales puede
generar confusión o incluso rechazo a la audiencia objetivo.
Tener en cuenta la sensibilidad cultural no solo ayuda a evitar errores, sino que también demuestra un respeto genuino hacia los
consumidores o clientes internacionales, lo que refuerza la confianza y contribuye a construir relaciones más sólidas y duraderas.
Las limitaciones de la IA: más allá de las palabras
Aunque la IA puede ser de ayuda y avanza a pasos agigantados, no nos engañemos: confiar exclusivamente en la IA para la creación de
contenido multilingüe es problemático por muchos motivos. A pesar de sus avances, las herramientas de IA tienen limitaciones muy importantes.
La segmentación de audiencias permite a las empresas personalizar sus mensajes para asegurarse de que cada grupo reciba la información de manera
que le resulte relevante y atractiva.
1. Falta de comprensión del contexto:
la IA no capta matices culturales, referencias locales o sensibilidades que son clave para una comunicación efectiva. Por ejemplo, una
frase correcta desde el punto de vista gramatical puede resultar ofensiva o confusa en un contexto cultural diferente.
2. Ausencia de creatividad y empatía:
la IA carece de la capacidad de generar contenido que resuene emocionalmente en el público. Mientras que un redactor humano puede
adaptar un mensaje para evocar emociones específicas, la IA tiende a generar textos funcionales, pero planos y repetitivos.
3. Falta de coherencia en proyectos a largo plazo:
sin la supervisión humana, las traducciones automáticas pueden variar significativamente en tono y estilo o en terminología
empleada a lo largo del tiempo, especialmente cuando se actualizan modelos de IA o bases de datos.
4. Falta de veracidad:
la IA suena muy segura de sí misma a la hora de ofrecernos respuestas a todos nuestros problemas o, en este caso, traducciones
o textos localizados para diferentes mercados. Pero, mucho ojo, la IA miente: da respuestas que pueden parecer totalmente correctas
sin serlo, lo que lleva a errores a la hora de publicar y, por lo tanto, a gastos innecesarios o incluso la pérdida de la credibilidad
por parte de los clientes. Mucho cuidado con esto.
La combinación ganadora: IA y supervisión humana
Para superar estas limitaciones y aprovechar al máximo las ventajas de la IA, la clave está en combinar tecnología y supervisión humana.
Esta estrategia híbrida permite optimizar tanto la calidad como la eficiencia.
1. Posedición humana: si queremos ahorrar tiempo y costes:
una opción es utilizar herramientas de traducción automática como punto de partida y posteriormente corregir los resultados con la
ayuda de traductores profesionales. Este enfoque combina la velocidad de la IA con el conocimiento lingüístico y cultural
de los expertos.
2. Uso de memorias de traducción y glosarios:
integrar memorias de traducción y glosarios personalizados garantiza la coherencia en el uso de terminología clave y estilo
de marca. Esto también facilita la colaboración entre equipos humanos y sistemas automatizados.
3. Supervisión cultural:
antes de lanzar contenido en un nuevo mercado, es esencial que expertos locales revisen y validen las traducciones para garantizar
que sean culturalmente apropiadas. Este paso es crucial para evitar errores de sentido o estilo que dañen la reputación de la marca.
4. Entrenamiento continuo de las herramientas:
las herramientas de IA mejoran con el tiempo cuando se entrenan con datos específicos de una empresa. Alimentar el sistema
con ejemplos de contenido anterior permite resultados más alineados con la guía de estilo de la marca.
La IA como aliado, no como reemplazo
La inteligencia artificial está transformando la forma en que las empresas crean y traducen contenido multilingüe. Si bien ofrece
beneficios innegables en términos de velocidad y ahorro de costes, también tiene limitaciones significativas que no debemos ignorar.
La verdadera ventaja radica en usar la IA como una herramienta complementaria, apoyada por la experiencia humana. Esta combinación
garantiza que el contenido no solo sea lingüísticamente preciso, sino también culturalmente relevante y alineado con los objetivos
de la marca. En un mundo donde la comunicación internacional es más crítica que nunca, integrar tecnología y talento humano es el
primer paso hacia el éxito.